Ya son más de 7 años que Apple presentó al mundo su nuevo cable, el que veríamos todos los días de forma rutinaria. El cable lightning. El cambio fue muy grande, del enorme cable de 30 pines, a uno mucho más pequeño y reversible.
Pero la realidad es que después de tantos años, no sigue siendo igual de perfecto que cuando lo presentaron
1- Es egoísta
Es un cable para nada sociable y amigable. Es el único en su especie y solo funciona para dispositivos creados por Apple, ya sea un iPhone o un iPad. Ya hasta las últimas Mac tienen USB tipo C pero en cambio en los otros dispositivos tienes que tener este cable. No te permite dejar tu cable en casa, ya que tendrás que buscar a otro que tenga iPhone. En cambio con otro tipo de cable, como el tipo C, no hay ni marca ni modelo ni nada, solo 1 cable compatible para miles de dispositivos
2- Es el cable más caro del mundo
Así es, Apple sabe que su cable es único, entonces pone precios altos para ganar más dinero con sus cables. Debido a esto muchas personas y me incluyo recurrimos a comprar cables de otras marcas que no siempre funcionan. Por algo hay que comprar certificados por Apple.
3- Es lento
Todavía en 2019 y Apple con un cable USB 2.0 de transferencia de datos. No me parece normal que un dispositivo te cueste tanto dinero y el cable no soporte carga rápida. Es uno de los dispositivos con carga más lenta del mundo actualmente.
4- Es el cable más débil que conozco
Todas las personas que conozco, han tenido o tienen un cable lighting roto, yo tengo uno aquí todavía que mi papá reparó y todavía funciona. Además de ser un cable caro, no tiene un buen material de construcción, algo que te hace comprar al menos 1 cable cada año.
Obviamente Apple no le conviene cambiar a USB tipo c. Esto haría perder mucho dinero y hacer una alianza con Android. Donde cualquier persona con un cable tipo c podría cargar tu Android y tu iPhone. Además no tendrás que comprar su cable certificado original, sino tendrás miles de opciones.